viernes, 11 de diciembre de 2009

ESCRITOS DE SAN JUAN BAUTISTA DE LA SALLE ENTRE 1694-1698

Durante el periodo de los años 1694-1698, San Juan Bautista de la Salle hace hincapié en algunos escritos redactados por él, los cuales eran libros prácticos para las escuelas y la vida de los Hermanos, tales libros fueron: Ejercicios de piedad para las escuelas cristianas, con oraciones y reflexiones para orientar la piedad de los escolares, el cual se reeditó varias veces. También escribió tres libros, semejantes entre sí: Instrucciones y Oraciones, para la Santa Misa, para la Comunión, para la Confesión, que imprimió también a poco de concluir su estancia en Vaugirard. Esos libros, puestos en manos de los niños, comprados seguramente por las parroquias o por los mismos Hermanos, permitían que los muchachos participaran más provechosamente de los sacramentos.

Se lanzó luego a un trabajo largo y difícil Redactó tres tomos, nada leves, que contenían catecismos, con el nombre de Deberes del cristiano. El primero resumía el dogma y la moral en texto seguido; el segundo repetía el mismo esquema en forma dialogada, y el tercero, también por preguntas y repuestas, trataba del Culto exterior y público, que en algún momento quiso titularse Vida cristiana. No terminó la obra hasta 1702.

Creyó igualmente que los tratados de cortesía existentes (había varios, incluso recientes, como los de Courtin y Fleury) no eran adecuados a sus alumnos: o se habían escrito para la gente bien, o carecían del hálito religioso que De La Salle ponía por doquier. Y se dispuso a redactar lo que terminaría por ser un best-seller. Reglas de urbanidad y Cortesía cristiana.
Compuso también dos trabajos normativos: la Regla del Hermano Director, que luego haría leer en las comunidades cada mes, y la Guía del formador de los maestros.

EJERCICIOS DE PIEDAD
Parece ser la primera obra impresa del Sr. De la Salle. Recoge lo que ya se venía haciendo desde los albores de la fundación. Tiene 52 páginas y contiene textos de oraciones que todo cristiano debe saber, redactados tanto en francés como en latín. Además tiene contenidos doctrinales de los catecismos “Deberes”, pero ahora en forma de oraciones. Los ejercicios espirituales estaban acompañados de Cánticos Espirituales sobre diversos temas de religión y moral cristiana.

INSTRUCCIONES Y ORACIONES PARA LA SANTA MISA, LA CONFESIÓN Y LA COMUNIÓN
Esta obra de san Juan Bautista de La Salle reúne tres escritos diferentes, que han terminado por publicarse en un solo volumen. En efecto, dentro de la obra se distinguen perfectamente las tres partes, que consisten en:

1. Instrucciones y Oraciones para la Santa Misa.
2. Instrucción metódica para aprender a confesarse bien.
3. Instrucciones y oraciones para la Confesión y la Comunión.

Su objetivo era tanto doctrinal como espiritual, con una clara orientación hacia la catequesis litúrgica para uso de las escuelas. En esta obra el Sr. De la Salle, los Hermanos y los alumnos encontraban motivaciones para acercarse más con fe y preparación espiritual a los sacramentos de la penitencia y la eucaristía, así como método práctico para participar en la Santa Misa. Respondía al interés catequístico, el sacramento de la Penitencia. Sus destinatarios eran los cristianos en general.

DEBERES DEL CRISTIANO
DEBERES DE UN CRISTIANO PARA CON DIOS Y LOS MEDIOS PARA CUMPLIRLOS BIEN, DIVIDIDO EN DOS PARTES
Se identifica como “Deberes I”. Tiene 504 páginas de texto seguido. Es más un Tratado de Teología que un manual de catecismo, era destinado para todas las personas. Este manual se usó como libro de lectura en las “escuelas cristianas”, al igual que se hizo con las “Reglas de comportamiento y de la cortesía cristiana”


DEBERES DE UN CRISTIANO PARA CON DIOS Y LOS MEDIOS PARA CUMPLIRLOS BIEN
Se identifica como “Deberes II”. Está escrito en forma catequística: preguntas y respuestas y consta de 310 páginas. En la autorización de impresión se le denominó “Catecismo de los Hermanos de las Escuelas Cristianas”, por su estructura interna que pertenecía a la época.
Sus destinatarios eran los novicios o candidatos a Hermanos y los alumnos, para sus clases de catecismo diario.


DEL CULTO EXTERIOR Y PÚBLICO QUE LOS CRISTIANOS TIENEN OBLIGACIÓN DE TRIBUTAR A DIOS, Y LOS MEDIOS PARA HACERLO
Es la tercera parte de los Deberes de un cristiano para con Dios. Está escrito también en forma catequística y tiene 301 páginas. Abarca el conjunto de la vida litúrgica. Invita a vivir la vida cristiana a la luz del Misterio de la salvación, y del culto que se le tributa a Dios a través de los Santos y sus fiestas. Propone muchas prácticas cristianas para poner en práctica las enseñanzas de Jesucristo. Es un magnífico ejemplo de Catecismos litúrgicos del siglo XVII.

REGLAS DE CORTESIA Y URBANIDAD
La obra Reglas de Cortesía y Urbanidad Cristiana es un libro concebido y realizado para uso de los alumnos en la escuela, aunque después desbordó esta primera intención. Era el libro que se empleaba en las Escuelas Cristianas, para los alumnos que estaban en el nivel octavo de lectura porque estaba impreso con letra gótica, y por lo tanto más difícil de leer de corrido que la escritura ordinaria. En el siguiente nivel, noveno y último, la lectura se realizaba en manuscritos. El estar concebido como libro de lectura del octavo nivel explica por qué se elaboró en letra gótica, que con el tiempo pasó a llamarse, precisamente, letra de «Civilité», es decir, la que se empleaba en el libro de lectura de «Civilité». El niño que ya leía correctamente en francés y en latín, se encontraba en el octavo nivel con la dificultad de los caracteres góticos.
La Regla de Cortesía y Urbanidad se dividen en dos partes:

La Primera parte. Del recato que se debe manifestar en los modales y en la compostura de las diversas partes del cuerpo
Segunda parte. De la urbanidad en las acciones comunes y habituales.

Fueron un éxito editorial y pedagógico.

REGLA DEL DIRECTOR
Son orientaciones y consejos a los Hermanos a quienes encargaba la dirección de una Comunidad. Se trataba de apuntes manuscritos que cada Director debía tener, leer, meditar y practicar. Estas orientaciones se fueron perfeccionando año tras año con la experiencia tanto de Juan Bautista como de los Hermanos Directores. Pero de estos primeros textos, ninguno nos ha llegado.
El manuscrito de 1718 que nos ha llegado se conserva en los Archivos de la Casa Generalicia. Es un cuadernito de 20 páginas, de 19 x 14,5 cm, pero sólo están escritas las 14 primeras. Consta de tres partes:

— La primera, de la página 1 a la 10, es propiamente la Regla del Hermano Director. En ella se define su función como Director y se expresan sus obligaciones con todo pormenor.
— La segunda parte, páginas 11 y 12, son las normas sobre el hábito de los Hermanos.
— La tercera, en fin, la más breve, en las páginas 13 y 14, especifica la alimentación de los
Hermanos.
El texto de la Regla del Hermano Director se ha publicado en francés en nueve ocasiones, reseñadas en el Cahier Lasallien No. 25, pp. 7-8.

En español se publicó por primera vez en el segundo volumen de la obra del Hno. Saturnino
Gallego, Vida y Pensamiento de San Juan Bautista De La Salle, páginas 179 a 190.
En la presente edición de las Obras Completas, se ha revisado la traducción para ceñirse con mayor fidelidad al texto francés, evitando formas o expresiones que si bien son equivalentes, se apartan algo del texto original.La numeración de los párrafos se corresponde exactamente con la edición francesa de Oeuvres Complètes.

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